Madres, dragones y otras historias

Menudo rollo de cuentos chinos nos contaban de niñas… princesas encerradas en castillos con dragones, apuestos príncipes enamorados que trepaban la torre y mataban fieras con su espada mágica. Historietas imposibles, sólo aptas para cuentos de hadas. Todos sabemos que en la vida real la única capaz de salvar a la princesa, trepar una hiedra, negociar con un dragón hambriento sin salir ardiendo y mantener la cordura mientras caen bajo sus pies cincuenta puentes de madera y cuerda… es «una madre».

Domingo de Mayo

Los días en los que corría, en los que volaba alto, aquellos en los que me frenaba de golpe y me caía rodando. Cuando decidía escalar montañas. Los días en los que intentaba ser mejor, y otros muchos en los que era peor. En mis aciertos, en mis dudas, en mis noches sin dormir… tú siempre eras mi madre.
Feliz día de la madre!