La Ciudad del Viento

Las torres son tan altas, y tan altos los gigantes…
Hoy he soñado que regresaba a Chicago, aquel espectáculo de torres inalcanzables bajo mis pies o sobre mi cabeza… cuantos ratos a solas, cuantos momentos contigo entre inmensas calles de cine. Será porque estoy enganchada de forma descomunal a «Shameless«, esa serie gamberra rodada en los suburbios de Chicago… será porque ayer vi como diez capítulos seguidos (cosas de esta ola de frío polar), no lo sé… pero mis recuerdos se vuelven increíblemente nítidos esta mañana congelada de domingo en Siberia.
Que empiece la música…

NUEVA YORK, LA PERFECTA ENTROPÍA

«Hay algo en el aire de Nueva York, que hace que dormir sea un desperdicio.»
 Creo que hay un antes y un después en la vida una vez aterrizas en Nueva York… un punto de inflexión. Sin duda es una ciudad que te dice algo, algo que nunca antes te dijo nadie, o todo lo que te decían mientras te hacías la dormida. Un lugar que vuelve humilde a las personas, que les recuerda lo pequeñas que son ante la inmensidad del mundo, entre sus edificios imposibles. Una ciudad sin descanso que pretende escalar el cielo, un fantástico caos organizado en avenidas perfectas, sonoridad y callejuelas cuadriculadas.

Menorca, Deja Vu

Una isla, agua por todas partes, ecos, voces que susurran secretos, magia en forma de temporal, un faro a lo lejos… una historia de verano, un coche galopando por un camino de tierra, la ventanilla abierta y esa ventolera de olor a sal y a algas salvajes… golpeándonos en la cara.
Bienvenidos a nuestro Cuaderno de Bitácora particular: M-E-N-O-R-C-A